domingo, 31 de mayo de 2009

¿Cómo puede ser que te alboroten mis placeres?
Te escucho mucho, te asfixio mucho, te impacto mucho, te siento mucho.
Yo te quisiera salvar, te voy a atornillar, te voy a herir un poquito más.

De quién son mis deseos de hoy?
Dame... dame tu vida.
Dame y tendrás mi piedad
dame la sed de tus ojos acorazados
y dame tu insolencia tambien.

Rara vez esta vida tiene sentido, amor
y asi ves que hasta mi sombra brilla
en esta ciudad.


El infierno de Luzbelito es un espejo para nuestra vergüenza.
Somos hijos de multivioladores muertos.
Somos hijos de puta que van a beber de sus aguas y, ya sabemos, los hijos de puta no descansan nunca.

jueves, 28 de mayo de 2009

Degradé


Una más alta, una mediana, una más baja.

que tontos, que locos.

YO SOY TERESA
SOMOS TERESAS
LAS TRES TERESAS
LAS TERESAS


Baila la negra.


Luna llena
Que
nos
volvamos
a
verrr

lunes, 18 de mayo de 2009

de mis MEJORES AMIGAS

domingo, 17 de mayo de 2009

Me buscó con la mirada y me contempló confundido. Yo lancé una significativa mirada hacia las guirnaldas de papel.
Se detuvo a considerarlo durante un instante y luego cambio de dirección. Me condujo a través del gentio hacia la puerta trasera del gimnacio. [...] Era capaz de recordar los nombres de todos aquellos que pasaban delande de mi a una velocidad de vértigo. De pronto, nos encontramos fuera del gimnacio, a la suave y fresca luz de un crepúsculo mortecino.
Me tomó en los brazon en cuanto estuvimos a solas. Atravesamos el umbrío jardin sin detenernos hasta llegar a un bando bajo de madroños. Se sentó allí, acunándome contra su pecho. Visible a traves de las vaporosas nubes, la luna lucía ya en lo alto e iluminaba con su nívea luz el rostro de Edward. Sus facciones eran severas y tenía los ojos turbados.
-Qué te preocupa?- le interrumpí con suavidad.
Me ignoró sin apartar los ojos de la luna.
-El crepúsculo, otra vez-murmuró-. Otro final. No importa lo perfecto que sea el día, siempre ha de acabar.
-Algunas cosas no tienen por qué terminar-musité entre dientes, de repente tensa.
Suspiró.
-Te he traido al baile-dijo arrastrando las palabras y contestando finalmente a mi pregunta-, porque no deseo que te pierdas nada, ni que mi presencia te prive de nada si está en mi mano. Quiero que seas humana, que tu vida continue como lo habría hecho si yo hubiera muerto en 1918, tal y como debería haber sucedido.
Me estremecí al oír sus palabras y luego sacudí la cabeza con enojo.
-Y en qué extraña dimensión paralela habría asistido al baile alguna vez por mi propia voluntad? Si no fueras cien veces mas fuerte que yo, nunca habrías conseguido traerme.
Esbozó una amplia sonrisa, pero la alegría de esa sonrisa no llegó a sus ojos.
-Tú misma has reconocido que no ha sido tan malo..
-Porque estaba contigo.
Permanecimos inmóviles durante un minuto. Edward contemplaba la luna, y yo a él. Deseaba encontrar la forma de explicarle qué poco interes tenía yo en llevar una vida humana normal.
-Me contestarás si te pregunto algo?-iquirió mirandome con una sonrisa suave.
-No lo hago siempre?
-Prometeme que lo harás-insistió, sonriente.
-De acuerdo- supe que iba a arrepentirme muy pronto.
-Parecías realmente sorprendida cuando te diste cuenta de que te traía aquí-comenzó.
-Lo estaba-interrumpí.
-Exacto-admitió-, pero algo tendrías que suponer. Siento curiosidad... Para qué pensaste que nos vestiamos de esta forma?
Sí, me arrepentí de inmediato. Fruncí los labios, dubitativa.
-No quiero decírtelo.
-Lo has prometido-objetó.
-Lo sé.
-Cuál es el problema?
Me di cuenta de que él creía que lo que me impedía hablar era simplemente la vergüenza.
-Creo que te vas a enfadar o entristecer.
Enarcó las cejas mientras lo consideraba.
-De todos modos, quiero saberlo. Por favor.
Suspiré. Él aguardaba mi contestación.
-Bueno, supuse que iba a ser una especie de... ocasión especial. Ni se me pasó por la cabeza que fuera algo tan humano y comun como... ¡un baile de fin de curso!-me burlé.
-Humano?-preguntó cansinamente.
Había captado la palabra clave a la primera. Obsevé mi vestido mientras jugueteaba nerviosamente con un hilo suelto de gasa. Edward esperó en silencio mi respuesta.
-De acuerdo-confesé atropelladamente-, albergaba la esperanza de que tal vez hubieras cambiado de idea y que, despues de todo, me transformaras.
Una decena de sentimiento encontrados recorrieron su rostro. Reconocí algunos, como la ira y el dolor, y, después de que se hubo serenado, la expresión de sus facciones pareció divertida.
-Pensaste que seria una ocasion para vestirse de tiros largos, a que sí?-se burló, tocando la solapa de la chaqueta de su traje de etiqueta.
Torcí el gesto para ocultar mi vergüenza.
-No sé como van esas cosas; al menos, a mí me parecía mas racional que un baile de fin de curso- Edward seguía sonriendo-. No es divertido-le aseguré.
-No, tienes razon, no lo es-admitió mientras se desvanecia su sonrisa-. De todos modos, prefiero tomarmelo como una broma antes que pensar que lo dices en serio.
-Lo digo en serio.
Suspiró profundamente.
-Lo sé. Y eso es lo que deseas de verdad?
La pena habia vuelto a sus ojos. Me mordí el labio y asentí.
-De modo que estás preparada para que esto sea el finla, el el crepúsculo de tu existencia aunque apenas si has comenzado a vivir-musitó, hablando casi para sí mismo-. Estás dispuesta a abandonarlo todo.
-No es el final, sino el comienzo- le contradije casi sin aliento.
-No lo merezcon- dijo con tristeza.
-Recuerdas cuando me dijiste que no me percibía a mi misma de forma realista?- le pregunté, arqueando las cejas-. Obviamente, tú padeces de la misma ceguera.
-Lo sé.
Suspiré.
De repente, su voluble estado de animo cambió. Frunció los labioas y me estudió con la mirada. Examinó mi rostro durante mucho tiempo.
-Estás preparada, entonces?- me preguntó.
-Esto...-tragué saliva-. Ya?
Sonrió e inclinó la cabeza hasta rozar mi piel debajo de la madíbula con sus fríos labios.
-Ahora, ya?- susurró al tiempo que exhalaba su aliento frio sobre mi cuello. Me estremecí de forma involuntaria.
-Sí- contesté en un susurro para que no se me quebrara la voz.
Edward si iba a llevar un chasco si pensaba que me estaba tirando un farol. Ya había tomado mi decisión, estaba segura. No me importaba que mi cuerpo fuera tan rigido como una tabla, que mis manos se transformaran en puñosy mi respiración se volviera irregular... Se rió de forma enigmatica y se irguió con gesto de verdadera desaprobación.
-No te puedes haber creído de verdad que me iba a rendir tan facilmente- dijo con un punto de amargura en su tono burlón.
-Una chica tiene derecho a soñar.
Enarcó las cejas.
-Sueñas con convertirte en un monstruo?
-No exactamente-repliqué. Fruncí el ceño ante la palabra que habia escogido. En verdad, era eso, un monstruo-. Mas bien sueño con poder estar contigo para siempre.
Su expresión se alteró, mas suave y triste a causa del sutil dolor que impregnaba mi voz.
-Bella-sus dedos recorrieron con ligereza el contorno de mis labios-. Yo voy a estar contigo... no basta con eso?
Edward puso las yemas de los dedos sobre mis labios, que esbozaron una sonrisa.
-Basta por ahora.
Torció el gesto ante mi tenacidad. Esta noche ninguno de los dos parecia darse por vencido. Espiró con tal fuerza que casi pareció un gruñido.
Le acaricié el rostro y le dije:
-Mira, te quiero más que a nada en el mundo. No te basta eso?
-Sí, es suficiente-contestó, sonriendo-. Suficiente para siempre.
Y se inclinó para precionar una vez más sus labios fríos contra mi garganta.

A disfrazarse se ha dicho!


sábado, 16 de mayo de 2009

Vos creés ser el más fiero,
el má
s prontuariado aquí,
el animad
or del juego
(el condimentador)
Estás buscando un pequeño
infierno para vos,
donde soportar el fuego
de mi ataque de hoy.
Sos un tipo pan comido,
no es tu culpa, no,
zambullido en el caldero
(es la fatalidad)
Es endemoniadamente caro lo que sos
¡este clip me pone tieso!

¡yo me bajo acá!

Canciones tristes,
dueñas del corazón.
La Tierra gira hoy, menos veloz.
En ciertas cosas el Diablo siempre es neutral.

sábado, 9 de mayo de 2009


(Aclaro, la foto está hecha a propósito, no se me cerró la reposera, jajaja).

Nunca me falten
Dicen que el tiempo es la fuerza más poderosa, más que el amor, dicen. El amor muere, el tiempo no, el tiempo perdura y transforma todo, nos cambia, se quiera o no. Uno cree que maneja el tiempo, hablamos de ganar o perder tiempo, de dejar pasar el tiempo, pero el tiempo pasa, lo dejemos o no. Dicen que uno cree que el tiempo lo arregla todo: con el tiempo te va a amar, con el tiempo la vas a olvidar, pero también dicen que el tiempo no arregla nada, que el tiempo arrasa, y lo que el tiempo rompe no se arregla, dicen. Dicen que el tiempo es la fuerza mas poderosa, los arqueólogos luchamos contra eso, tratamos de rescatar objetos, historias, y tratamos de salvarlas del paso del tiempo, pero el tiempo avanza, avanza y avanza. El tiempo no es malo ni bueno, algunas cosas las destruye, a otras las vuelve mejores, como a un buen vino, y están las que resisten al paso del tiempo, como esta silla de roble, el tiempo pasa y el roble sigue intacto, como los sentimientos nobles, que pase lo que pase no mueren con el tiempo. Porque el tiempo pasa y se olvida de mí, de vos, pero aun no puede olvidarse del amor.

MIS Mejores

A veces da julepe abrir los ojos, porque por ahí los abrís y ves todo patas para arriba. Y eso es lo que en verdad da miedo, los cambios. Como un chico que juega a las escondidas tapándose los ojitos, creyendo que así no lo ven, uno a veces cierra los ojos como si así fueran a desaparecer los problemas. Como si muerto el cartero, fueran a desaparecer las cartas fuleras. Uno se hace el perro que tumbó la olla, como si el dolor que siente no existiera. Uno detesta y ama a esa persona o a ese espejo que te canta las cuarenta. Uno detesta y ama a quien abre tus ojos.
Abrir los ojos tiene gusto a membrillo con queso: es agridulce. Por un lado, como que se pierde la magia, pero por el otro... se sale del engaño. A veces lo que tenemos que ver es tan horrible, que preferimos hacer la vista gorda y cerrar la tranquera, y vivir en una cajita de cristal. Y otras veces la burbuja se pincha, y no queda otra que abrir los ojos y mirar lo que no queremos ver. El corazón se nos estruja y nos quedamos sin aire, ahogados.
Duele abrir los ojos. Es como salir de la oscuridad, que la luz te enceguece. Ojos que no ven, corazón que no siente. Mejor mirar para otro lado, dicen. Meter la cabeza en la tierra como hace el avestruz. Pero para que algo cambie hay que romper la burbuja, hay que salir de la cajita de cristal. Abrir los ojos y animarse a ver, aunque lo que haya para ver nos estruje el corazón.
Alejando D, filósofo del siglo pasado, afirmo que todo lo que hacemos en la vida, lo hacemos para seducir. Seducir a alguien, es lograr que desee lo que uno quiere que desee. Seducir es incentivar, estimular, provocar el deseo en el otro.
Muchos esperan en silencio detectar una señal en el ser amado, esperan ser deseados. A otros, lo que los seduce, es sentirse deseados. A otros, nos seduce lo opuesto, sentirse no deseados. A otros, los seduce lo prohibido, lo imposible, lo que no pueden tener. ¿Existe una sola manera de seducir? ¿Es posible seducir a alguien que no nos desea? ¿Alcanza con la seducción para el amor?. Si se desea lo que no se tiene, cuando se tiene, ¿se sigue deseando? ¿Tendrán algún efecto las “técnicas de seducción”?...
“Todo un tema el de la seducción… ¿nunca te paso que no sabes como hacer para que la otra persona se de cuenta de lo que te pasa sin hechar a perder esa relación?”…
Para seducir hay que tener la paciencia del pescador; saber esperar el momento exacto. Yo creo, que tal ves la mejor técnica sea no tener técnicas… pero guiándonos a través de la intuición seguramente sea mas fácil que a través de la razón. Tanto especular, le juega en contra a la seducción. La intuición, en cambio, nos abre nuevas puertas, nos da nuevas llaves.
Uno pretende que sueñen con nosotros, queremos ser el único en la vida del otro, pero solo se puede aspirar a ser el elegido.
Seducir tiene sus vueltas; a veces, el amor muere cuando damos nuestro amor por sentado, y renace cuando sienten que pueden perderlo. Nos preocupa mucho que no halla terceros dando vueltas, pero a veces, esos terceros, ayudan a la seducción, la encienden.
El mayor riesgo de un seductor, es caer seducido; ahí se vuelve torpe, predecible. El riesgo de un seducido, es su inseguridad, que puede llevarlo a cometer ciertas torpezas…
Uno no sabe por que ama, ni por que es amado. Seducir tal ves sea simplemete ayudar un poquito a esa magia que ocurre, sin que sepamos bien como ocurre, ni porque.

miércoles, 6 de mayo de 2009



Tal vez vuelva a tu vida otra vez a invitarte a beber el dulce veneno.

Desde que nacemos aprendemos a ver y entender las cosas de una sola manera. Galileo Galilei afirmó que la Tierra giraba alrededor del Sol, y no al revés. Todo el mundo lo humilló... ¿cómo podía afirmar semejante desatino? Si todos veían claramente que el Sol era el que se movía, y no la Tierra. Muchos acusaron de loco a Colón cuando supuso que la Tierra era redonda, si todos veían claramente que la Tierra era plana. En su época, la gente disfrutaba de los libros de Julio Verne, aunque para todos era un autor fantasioso. ¿A quién se le podía ocurrir en aquel momento que una nave podía viajar debajo del agua, o que se podía viajar a la Luna?
Pero cuando nos animamos a pensar diferente, aparecen soluciones diferentes. A veces para llegar a un lugar hay que dar rodeos, ir y venir. En general, sólo confiamos en nuestros ojos, cuando en realidad tenemos más sentidos. A veces no es viendo, sino tocando, oliendo, escuchando o degustando que se resuelve algo. Entendemos las palabras de una sola manera. Una "eminencia" es un hombre, para todos. ¿Por qué una eminencia no puede ser una mujer? Dejar de lado la única manera que tenemos de ver el mundo. Bueno, de eso se trata el pensamiento lateral. Nada tiene una única solución. No todo es lo que vemos por los ojos; por algo tenemos otros cuatro sentidos más. Simplemente tenemos que animarnos a usarlos y aprender a ver, a ver con los otros sentidos. No todo es lo que vemos con los ojos. Siempre hay más, mucho más. Simplemente hay que aprender a ver.

muy ricos los chicles ácidos de hoy, jajaja!

Lobo suelto, cordero atado.

VAMOS A BRILLAR MI AMOR!
En el amor no hay leyes, nos se repetan las reglas
y los juramentos NO EXISTEN.
Técnicas de seducción!

viernes, 1 de mayo de 2009

hello blog, tanto tiempo