viernes, 11 de junio de 2010

'Escucha, si acaso no regreso a casa junto a mi mujer y tú la vuelves a ver, dile que yo hablaba de ella todos los días, a todas horas. En segundo lugar, dile que la he amado más que a nadie en el mundo. Y en tercer lugar, que la felicidad del breve tiempo de nuestro matrimonio compensa todo lo demás, incluido el sufrimiento soportado aquí.'